La muestra explora la relación entre eventos sísmicos y su representación religiosa en el área surandina. Aunque hoy los terremotos se entienden desde la ciencia, en la época virreinal eran vistos como fenómenos vinculados a lo sagrado, con imágenes de Cristo que adquirieron carácter milagroso y protector. Destacan pinturas del “Señor de los Temblores” de Cusco, vinculadas al devastador terremoto de 1650, donde la imagen milagrosamente se salvó, convirtiéndose en símbolo de protección y devoción. De manera paralela, en Santiago de Chile, tras el terremoto de 1647, surge el culto al “Señor de Mayo,” un Cristo crucificado que también se salvó y se convirtió en emblema de esperanza y reconstrucción, con procesiones anuales que aún perduran. La exhibición busca mostrar cómo estos fenómenos naturales impactaron la historia, la cultura y la identidad regional, integrando distintas disciplinas y resaltando la fe popular que interpreta los desastres desde una perspectiva religiosa pre-científica. Así, se valora la riqueza cultural que emerge del encuentro entre la naturaleza y la espiritualidad.
15 de Marzo 2019 al 10 de Agosto 2019
Horario
Lunes a jueves 10:00 a 14:00 hrs. y 15:00 a 18:00 hrs.; viernes 10:00 a 14:00 hrs. y 15:00 a 17:00 hrs. Sábado 10:00 a 14:00 hrs.
Sala Joaquín Gandarillas, Centro Extensión Alameda
local_play Entrada
Liberada